La rehabilitación térmica es una nueva propuesta, amigable con el medio ambiente, que ha surgido para hacer frente a la necesidad de regular la temperatura de los edificios de una manera sustentable.
Una rehabilitación térmica de la fachada de un edificio, es capaz de ahorrar a quienes habitan en este entre un 25 y un 30% de la energía que consumen los aparatos tanto de calefacción, como los de refrigeración. Debido al costo de la obra, este tipo de modificaciones es recomendable para zonas con temperaturas muy frías, o muy cálidas. Es importante destacar que, que una edificación cuente con una fachada que fue térmicamente rehabilitada es una gran ventaja a la hora de pensar en vender o alquilar la propiedad, y para acceder eventualmente a subvenciones o mejoras fiscales.
Dentro de las opciones para la rehabilitación térmica existen las siguientes técnicas:
Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior
Este sistema se basa en aplicar un revestimiento aislante a la fachada de la propiedad, protegido por un mortero y asegurado con adhesivos o de manera mecánica.
Esta técnica requiere poco mantenimiento, es de fácil instalación y además contribuye a la aislacion acústica.
Sistema de Aislamiento con Fachada Ventilada
Esta alternativa es cuando la fachada posee un aislamiento rígido o semirrígido, de materiales como la lana mineral en su mayoria, y una hoja de protección. Esta última está separada del material aislante y se genera un cámara de circulación del aire por convección.
Esta alternativa no reduce el espacio útil de la fachada, es de fácil instalación, ya que la misma se realiza solo en el exterior, y además lleva un mantenimiento mínimo.
Sistema de Aislamiento de Fachadas por Inyección en Cámara
Una opción más es realizar una inyección de aislamiento térmico en la cámara de aire, si es que la fachada del edificio cuenta con una. En general se usa como aislante la espuma de poliuretano o lana mineral insuflada.
En general se implementa esta técnica como última opción ante la imposibilidad de usar sistemas externos. La ventaja es que aporta mayor solidez a la fachada y es muy económico.
Sistema de Aislamiento Térmico por el Interior
A nivel interior, se utiliza la aplicación de aislantes térmicos y luego su posterior revestimiento con un material apropiado para tal fin. Es la opción ideal cuando no se desea modificar el aspecto externo de la edificación o para cuando las paredes internas precisan refacción.
Sistema de Poliuretano Proyectado para Medianeras
Este es el sistema que se utiliza para reparar las paredes que quedan expuestas tras la demolición de una edificación vecina. En estos casos es indispensable el aislamiento de la pared en cuestión.
Del mismo modo que con la fachada, es importante tener en consideración el techo de una propiedad, ya que su impermeabilización correcta también influye drásticamente en el aislamiento térmico y en la preservación de la construcción. Los techos y cubiertas pueden ser impermeabilizados mediantes a sistemas de láminas asfálticas, láminas de caucho e incluso sistemas líquidos.
Lo ideal es evaluar cada caso particular y escoger entre todas las opciones existentes, la alternativa más adecuada para la situación particular.
Nuestros presupuestos se realizan sin compromiso y en la aceptación de ellos tienen una durabilidad según la magnitud de la obra entre 6 meses y dos años.
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